Debut en las caídas

No me había hecho el tiempo para compartir el primero de muchos desahogos. Como dice el título de este post: debuté en la caídas como mamá.

Soy, como muchas, de esas mamás que no deja sola a su hija ni 3 segundos. Ni siquiera me baño cuando estoy sola, todo para evitar cualquier tipo de incidente, accidente. Pero bueno, hace unas semanas Amparito se cayó de la cama: Me di vuelta tres segundos y por evolución casi espotánea Amparo pasó en esos segundos de patalear en la cama a intentar sentarse y rodar. Mi guagüita creció. Cresta! Lo primero que hizo fue llorar a todo pulmón, como nunca (después me enteré que esto es una buena señal); la tomé en brazos y me puse a llorar con ella. No sé si fueron 1, 2, 3 minutos ó 1 hora, el tema es que llamaba y llamaba a mis cercanos y por arte de magia (o en mi mente era así) NADIE ME CONTESTABA. Me desesperé, me dio pena, miedo, culpa. 

Aprendizaje de todo, primero evitar por todos los medios dejarla en una posición o lugar de posible caída, y lo segundo conservar la calma y hacer un rápido análisis mental y físico de la situación (lloró? mueve sus brazos? sus piernas?). Después cada uno verá lo que hace. El mejor consejo es hacer lo que los deje más tranquilos. Nosotros fuimos a la clínica porque vi casi en primera fila el golpe y fue muy feo. Así, descartamos médicamente que no había problemas. Durante todo el tiempo en la clínica me sentí culpable. Cuando me llamaban para preguntar decía "Se me cayó de la cama". 

Una querida amiga y mamá me dijo algo muy tranquilizador: "Tú no la empujaste, así que deja de decir que se te cayó". Y así, llegaron un montón de historias de otras mamás (incluso la mía) de caídas y golpes, y el sentimiento era compartido, me sentí muy acompañada y me di cuenta de que se vienen muchas más caídas y golpes (físicos y emocionales) pero lo importante es que mamá esté ahí para acompañar y consolar.